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Si quiere contratar legalmente a talentos internacionales para trabajar en Francia o trasladar al país a talentos remotos globales, debe asegurarse de que el empleado tiene derecho legal a trabajar -y vivir- en Francia.
Sin embargo, sin la nacionalidad francesa, para trabajar en el país es necesario un visado o permiso de trabajo. A continuación le explicamos lo que los empresarios deben saber sobre los visados y permisos de trabajo franceses.
Los ciudadanos franceses están legalmente autorizados a trabajar en Francia. Asimismo, los ciudadanos de los Estados miembros de la Unión Europea (UE) y del Espacio Económico Europeo (EEE), Suiza, Mónaco y Andorra gozan de libertad para trabajar en Francia sin visado ni permiso.
Sin embargo, los ciudadanos de otros países no pertenecientes a la UE ni al EEE deben obtener un permiso de trabajo válido para residir y trabajar legalmente en Francia.
En la mayoría de los casos, se requiere una oferta de trabajo en mano para poder optar a un permiso de trabajo francés. Como empleador, es tu responsabilidad obtener los documentos necesarios que demuestren que no has podido encontrar a un ciudadano francés para realizar el trabajo.
Para solicitar un permiso de trabajo a través del portal de solicitudes en línea del Ministerio del Interior y cumplimentar el formulario de solicitud en nombre de un empleado, necesitará:
Para entrar en el país con permiso de trabajo, los talentos internacionales deben aportar:
El visado de entrada puede servir como permiso de trabajo en determinadas situaciones de corta duración. Para estancias superiores a tres meses, también es necesario solicitar por separado un permiso de residencia.
La guía oficial del gobierno francés para la autorización de trabajo de un empleado internacional en Francia ofrece información más detallada.
Existen varios visados de trabajo franceses para los talentos internacionales. El tipo de visado que necesita un empleado extranjero depende de la duración de su estancia.
Las empresas sin entidad francesa pero con empleados que trabajan para clientes franceses suelen necesitar un permiso de trabajo y un visado de larga duración. Del mismo modo, trasladar a un empleado a una sucursal o filial francesa existente requiere un permiso de trabajo y un visado de larga duración.
Otra opción es la Tarjeta Azul UE, un permiso de trabajo válido durante cuatro años que permite a los trabajadores cualificados de fuera de la UE/EEE trabajar en países como Francia.
Los familiares de los empleados trasladados suelen necesitar un visado de reagrupación familiar, salvo en los casos en que el empleado sea titular de un pasaporte de talento (passeport talent).
El proceso de solicitud de visado puede ser largo debido a la intervención de varias oficinas francesas en la tramitación de las solicitudes de visado de trabajo, entre ellas la Dirección Regional de Economía, Empleo, Trabajo y Solidaridad (DREETS), el Ministerio del Interior y la Oficina Francesa de Inmigración e Integración (OFII).
Debido a este proceso multiinstitucional, obtener un visado de trabajo puede llevar hasta tres meses, y obtener un permiso de residencia tarda entre 15 y 45 días más.
Los empresarios deben iniciar la solicitud del permiso de trabajo al menos tres meses antes de la fecha prevista de incorporación del empleado para garantizar un proceso de incorporación sin contratiempos.
Al contratar talentos internacionales en Francia, los empresarios están sujetos a impuestos que varían en función de la duración del contrato y el salario del empleado:
Los empleados también deben pagar tasas de solicitud: el visado de corta duración cuesta 9-60 euros y el de larga duración 99 euros. Todos los visados, salvo el de corta duración, están sujetos al pago de una tasa de 225 euros por el permiso de residencia.
Contratar talento internacional sin un permiso de trabajo válido en Francia puede acarrear graves consecuencias. Las empresas infractoras se enfrentan a multas de hasta 15.000 euros por cada trabajador indocumentado.
Incluso es posible que los representantes de la empresa se enfrenten a penas de prisión de hasta cinco años.
Asociarse con un Employer of Record (EOR) puede ayudar a las empresas a contratar talento internacional sin problemas en Francia y evitar multas. Los EOR minimizan el riesgo asegurando los permisos de trabajo y los visados y gestionando las nóminas, los impuestos y las prestaciones.
Reserve una demostración para saber cómo un EOR puede ayudarle a navegar por los entresijos de la contratación de talento internacional en Francia.
