Si gestiona un equipo remoto global, es posible que ya tenga algunos autónomos trabajando junto a sus empleados a tiempo completo.
Añadir contratistas a la mezcla proporciona muchas ventajas a su empresa, incluida la flexibilidad para escalar según sea necesario.
Aun así, hay diferencias entre los contratistas y los empleados a tiempo completo, incluidas las prestaciones a las que tienen derecho, que los empresarios deben conocer.
Mantener el cumplimiento y evitar el riesgo de clasificación errónea exige comprender los entresijos de estos derechos, incluida la paga de vacaciones y días festivos.
Principales conclusiones:
- Aunque los empleados a tiempo completo y los contratistas independientes trabajen juntos en los mismos proyectos, es posible que no reciban las mismas prestaciones.
- La mayoría de los autónomos no tienen derecho a prestaciones por cuenta ajena, como días de baja por enfermedad, vacaciones pagadas o paga de vacaciones.
- Los contratos ayudan a establecer las expectativas de los contratistas independientes y facilitan que su empresa evite el riesgo de clasificación errónea.
¿Cuál es la diferencia entre un empleado y un contratista?
La respuesta es bastante sencilla.
Por lo general, los contratistas son contratados como autónomos para un trabajo o un periodo de tiempo concretos. A menudo, cubren un nicho específico fuera de las actividades cotidianas de una empresa, como la redacción de textos para la revisión de su sitio web o la producción de vídeo para un anuncio.
Los contratistas utilizan su propio equipo y establecen sus propios horarios. No son asalariados y probablemente trabajen por horas o por contrato.
Por otra parte, un trabajador por cuenta ajena suele trabajar en un horario fijo determinado por su empleador y utiliza el equipo proporcionado por la empresa.
A cambio, los empleados reciben un salario que se rige por las leyes locales que supervisan el salario mínimo y el pago de horas extraordinarias, y tienen derecho a prestaciones estatutarias como subsidio por enfermedad, seguro médico y vacaciones pagadas.
Parece sencillo, pero tiene truco.
La legislación laboral suele diferir de un país a otro. El empresario es responsable de clasificar correctamente a cada empleado, independientemente de dónde se encuentre. Si no cumple la legislación laboral de un país, las consecuencias pueden ser costosas.
¿Tienen derecho los contratistas a vacaciones pagadas?
En general, no. Como profesionales autónomos, los contratistas independientes gestionan sus propios horarios, se encargan de sus propios impuestos y presupuestan el tiempo libre reservando dinero para cubrir esos días no pagados. Suelen incluir esos costes en sus tarifas por hora o por proyecto para asegurarse de que están cubiertos.
Al fin y al cabo, los autónomos suelen cobrar sólo por el trabajo que realizan. Si los contratistas no trabajan en un día festivo de la empresa, no suelen facturar ese día.
Dicho esto, algunos contratistas pueden negociar el pago de días festivos como parte de su acuerdo con una empresa. Y para los que trabajan por cuenta ajena, los pagos constantes pueden funcionar a veces como PTO.
Parece que ofrecer tiempo libre remunerado a los empleados contratados es una ventaja que podría diferenciar a su empresa, ¿verdad? Pues es cierto. Ofrecer tiempo libre remunerado a todos los trabajadores podría darle una ventaja a la hora de atraer a los mejores talentos globales autónomos. Pero proceda con cautela.
Ofrecer tiempo libre remunerado o prestaciones similares a los contratistas puede aumentar el riesgo de clasificación errónea. Las sanciones pueden incluir multas elevadas, atrasos salariales y, en casos graves, penas de cárcel.
¿La mejor apuesta para evitar riesgos de clasificación errónea? Busque asesoramiento jurídico de expertos en cada región en la que emplee autónomos o asóciese con un Employer of Record.
Cómo gestionar el tiempo libre de sus contratistas
Aunque no se les pague, los contratistas independientes se ausentarán ocasionalmente del trabajo, por lo que tendrás que planificarlo.
Para que todo vaya sobre ruedas, establece un procedimiento para que los contratistas te informen de cuándo y cómo tienen previsto ausentarse por vacaciones o festivos. Así te resultará más fácil organizar la cobertura necesaria durante su ausencia.
La opción más sencilla podría ser delegar el trabajo extra en otro autónomo o en un miembro del equipo a tiempo completo. Incluso puedes dejar que el autónomo que se tome vacaciones subcontrate el trabajo contratando a alguien de su confianza para que se encargue de sus tareas durante su ausencia.
Cuando sea posible, anime a los contratistas a planificar las vacaciones teniendo en cuenta los hitos del proyecto para minimizar las interrupciones. Recuerde, sin embargo, que los autónomos no tienen las mismas responsabilidades para con su empresa que los empleados a tiempo completo. No puedes controlar cómo o cuándo trabajan sin arriesgarte a clasificarlos erróneamente.
La importancia de acuerdos claros con los contratistas
Una forma de ayudar a minimizar los riesgos de clasificación errónea es crear un contrato de trabajo cada vez que contrate a un nuevo contratista independiente.
Un acuerdo claro puede definir el estatus del autónomo desde el principio, garantizar la confidencialidad de la información de su empresa y ayudar a minimizar el riesgo de clasificación errónea.
Piense en un contrato como una hoja de ruta para su relación laboral que detalla:
- A quién pertenece la propiedad intelectual creada por el contratista
- Qué servicios prestará el contratista, qué resultados espera obtener y las tareas específicas necesarias para completar el encargo.
- Cuándo empieza el contrato y cuándo vence el proyecto
- Cómo se pagará al contratista
El contrato NO debe incluir detalles como las horas que se espera que trabaje el contratista o el lugar en el que se realizará el trabajo, ya que esto se asemejaría más a una relación empleado/empleador.
Si quieres abordar el tema del tiempo libre, establece claramente en el contrato que la remuneración del trabajador se basa en las horas trabajadas o en los entregables completados y que, como contratista independiente, no tiene derecho a permisos retribuidos por festivos, vacaciones, baja por enfermedad, etc.
Se les paga por el trabajo que realizan, nada más. Esto ayuda a establecer expectativas desde el principio y favorece una clasificación adecuada de los trabajadores.
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